smørrebrød

El archifamoso sandwich abierto de los daneses.

El original, hecho con pan de centeno untado con buena mantequilla y cubierto de pescados ahumados, paté de hígado, carne en conserva y en gelatina, queso, encurtidos, hortalizas crudas y hierbas frescas.

Facilísimo de hacer, saludable y mi canon actual de la comida corazón.

¿Cuál es el secreto? Un buen pan. Ése es el secreto. Un buen pan, y a ser posible, un pan telúrico, como dice Ibán Yarza, un pan oscuro y de sabor profundo.

Yo he gastado el pan que hago habitualmente para las tostadas del desayuno: rebanadas de pan de centeno con especias y grano de centeno remojado, y de pan de espelta con trigo sarraceno y semillas de lino.

Adaptable a cualquier gusto. Ideales para darle un meneo a la imaginación.

Perfectos para llevar a una comida en casa de amigos: lo metes todo ya preparado en botecitos y bolsitas zip y allí lo montas en 10 minutos.

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Las combinaciones son infinitas.

Yo hoy para nuestra excursión a Agres en día de lluvia he hecho estos:

 

· de salmón y mayonesa de mostaza_

• hacer una mayonesa de mostaza con dos cucharadas de mayonesa, una de mostaza antigua, media cucharadita de mostaza de Dijon, una cucharadita de jarabe de arce, un chorrito de limón y sal.
• extenderla sobre las rebanadas y coronarlas con cortaditas de salmón, una capa de rodajas de aguacate, rabanitos y cebolletas cortados en rebanadas finas, unas ramitas de hinojo, láminas de cebolla agridulce encurtida y flores de salvia.

· de salmón y pepino_

• hacer una salsa tipo tzatziki con una cucharada de mayonesa, una cucharada de yogur griego, un chorrito de limón, sal, pimienta molida y una cucharada de crême fraîche.
• añadirle una cebolleta muy picada, tres pepinillos agridulces picados y una cucharada cebollino picado.
• extenderla sobre las rebanadas y coronarla con salmón, pepino cortado en rebanadas finas, berros y hojitas de eneldo, rociados con unas gotas de vinagreta.

· de arenque ahumado y pera_

• mezclar dos cucharadas de queso crema con una cucharada de salsa de pesto verde y una cebolleta muy picada.
• caramelizar una pera conferencia cortada en cubitos con mantequilla y azúcar moscovado.
• pochar la parte blanca de un puerro en mantequilla hasta que esté completamente lacio. Añadirle una cucharada de jarabe de arce, darle una vuelta y reservarlo.
• extender la crema de pesto sobre las rebanadas y coronarla con los arenques ahumados cortados en trocitos, los cubitos de pera, los trocitos de puerro y unas hojitas de romero picadas.

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Y sí, platos como éste me hacen darme cuenta de cuánto ha cambiado mi manera de comer y mis deseos relacionados con la comida en estos cinco años que llevo escribiendo este cuaderno.

Ahora, en esta nueva fase de comer de otra manera en que me encuentro, mi perfecta cena de sofá y peli es ésta, y no un sandwich tostadito burbujeante de mantequilla y queso cheddar.

Que me sigue pareciendo una cosa maravillosa, pero ahora se me hace la boca agua mucho más con este otro plato, lleno de verde crujiente, pescado ahumado y encurtidos.

Y como si algo sé seguro es que aunque no nos guste reconocerlo, lo único que de verdad tiene poder en la vida es el deseo, me parece que en esto del cambio de paradigma en la manera de comer, definitivamente, he llegado a un puerto nuevo. : )