koftas con tzatziki
koftas con tzatziki
{para cuatro buenos comedores}
{para las koftas}
- 500 gr de carne tierna de cordero, picada
- un puñado generoso de piñones tostados, pasados por la picadora
- 1/4 de taza de cebolla picada con hojas de perejil
- 1 ajo prensado (utiliza ese instrumento que venden al efecto, es la mar de práctico!)
- 2 cucharaditas de sal
- 2 cucharaditas de coriandro molido
- 1 cucharadita de comino
- 1/2 cucharadita de canela
- 1/4 de cucharadita de nuez moscada
- una pizca de pimienta de cayena, (o hasta 1/4 de cucharadita, si aprecias el sabor picante)
Mezclar todos estos ingredientes y dejar reposar media hora. Mientras, poner a remojo unas cuantas brochetas de madera.
{para el tzatziki}
- 1 pepino pelado rallado o troceado muy pequeñito, en este caso sin piel ni semillas (1 pepino no muy grande)
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 1 cucharadita de sal
- 1/4 de cucharadita de azúcar (o de jarabe de arce si no utilizas azúcar, como yo)
- una pizca de pimienta de cayena, o hasta 1/4 de cucharadita, si aprecias el sabor picante
- 3 cucharadas soperas de menta o hierbabuena picada (el manojito de hojas que cabe en una mano, bien apretaditas)
- 2 yogures estilo griego
- pan de pita
Para formar las koftas, amasamos la pasta hasta que quede homogénea.
Formamos bolitas con las manos y encendemos el grill.
Disponemos una bandeja con papel de hornear.
Colocamos las bolitas en las brochetas, y éstas en la bandeja. Colocamos la bandeja bajo el grill, y vamos rotando las brochetas cada varios minutos hasta que se doren de forma homogénea. Según hornos, altura a la que coloques las bolitas, etc, tardarás entre 10 y 20 m.
Mezclamos todos los ingredientes del tzatziki, y después ajustamos el sabor al gusto con limón, sal y menta. Reservar en la nevera.
Calentar las pitas y reservarlas calientes dentro de un paño. Colocar algunas hojas verdes, brotes, palitos de zanahoria, aritos de cebolla tierna, cebolla dulce o cebolla roja… A tu gusto.
Sacar los ingredientes a la mesa, las koftas y el pan pita calentitos, y añadir una ensalada de buenos tomates.
Y a disfrutar de comer con las manos! ;)
Feliz semana a todos!
Wow me ha encantado el post, cuántas cosas en común Fernanda. Yo tuve una época de no parar, y además era como que me sentía orgullosa de ello, de hacer muchas actividades, no tener ni un minuto libre….hasta que me di cuenta que estaba equivocada. Parece que la sociedad, la cultura nos arrastra, tenemos muchos estímulos y queremos hacer de todo, pero no puede ser. Ahora estoy aprendiendo a disfrutar de no hacer nada en algún ratito, y no pasa nada, es posible. Seguro que has leído «Elogio de la lentitud» de Carl Honore (te gustará).
Pues nada a cuidarnos, a saborear la vida despacio e intentar para el runrun…
Me encanta el plato que has hecho, siempre sorprendes con platos diferentes y originales. Tengo que probarlos con el pan de pita…ummm qué rico.
Muchos besos Fernanda
Hola Ana, muy buenos días de lunes lluvioso! Cuánto me gusta encontrar conexión con otras mujeres en estas cosas de todos los días, y en nuestras maneras de ir avanzando. Creo que me acuerdo de algo que me contaste de tu verano en el pueblo, y ya me hizo pensar entonces que tú eras de las mías, que también buscabas esa clase de equilibrio con el trabajo y el tiempo, o mejor dicho, con el agonio y el tiempo. El libro de Honoré, en efecto, me encanta. Muchas gracias bonita. Y un fuerte beso. Feliz día!